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Hoy,13 de Mayo del 2025
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“Este Gobierno es timbero, mentiroso y psiquiátrico”
Uno de los más duros fue Eduardo Buzzi, ex presidente de la Federación Agraria Argentina, quien apuntó directamente contra el presidente y su equipo económico:
“Este Gobierno es mentiroso y psiquiátrico. Dicen una cosa y hacen otra. Nos toman por idiotas. Amenazan con subir retenciones cuando prometieron bajarlas. ¿Dónde quedó la palabra empeñada? ¿Dónde quedó la libertad que tanto declaman?”, cuestionó con indignación en declaraciones a Radio Splendid.
Buzzi no se detuvo ahí y acusó al Gobierno de estar aplicando una política de chantaje económico:
“Esto no es otra cosa que una extorsión. Lo que están haciendo ahora es una fantochada para no llegar fundidos a las elecciones. Necesitan juntar 400 millones de dólares y pretenden que lo pongamos nosotros, los productores, una vez más. Nos aprietan porque no tienen otro plan más que meter miedo y apretar al que trabaja”, y agregó: “Cedieron de manera vergonzante a todos los condicionamientos del FMI”.
El ex dirigente también critico a la Sociedad Rural
“Nos hablaron de bajar impuestos, de premiar al que produce, de sacar el Estado de encima. Todo mentira. Apenas se ven apretados, vuelven con la misma receta de siempre: ajustar al campo. Es el mismo esquema que antes, pero con más cinismo”, afirmó.
Buzzi apuntó también contra la conducción de la Sociedad Rural y su presidente, Nicolás Pino, al que acusó de estar alineado con el Gobierno en lugar de defender a los productores:
“Pino no representa al campo, es más vocero de Milei que presidente de una entidad gremial. Se calla mientras nos vacían. El Gobierno no tiene idea del interior, no conoce la realidad del pequeño y mediano productor. No le importa la producción, le importa la timba financiera”, denunció.
La bronca en el campo es generalizada. Muchos productores sienten que están pagando el costo de un modelo que no los contempla.
“Cada vez somos menos. La mayoría está fundida o al borde. Nos dicen que nos abracemos al mercado, pero lo único que crece es la presión fiscal y el desprecio por el que produce”, se quejó Buzzi.
Mientras tanto, desde el Gobierno intentan bajar el tono de la advertencia, pero el daño ya está hecho. Las amenazas de nuevas retenciones cayeron como un baldazo de agua fría y reavivaron un conflicto que parecía latente, pero nunca se había ido del todo.
De esta forma, en dos meses las retenciones subirán hasta 7 puntos porcentuales. Para la soja irán de 26% a 33%; derivados de soja pasará de 24,5% a 31%; en el caso del trigo se elevarán de 9,5% a 12%; la cebada, el sorgo y el maíz treparán de 9,5% a 12%, y el girasol irá de 5,5% a 7% a 5,5%. La baja se había anunciado de forma provisoria en enero de este año.
Por su parte el presidente de la SRA Nicolas Pino, salió a aclarar que los productores no son quienes “liquidan”, sino que esa responsabilidad recae en los exportadores y acopiadores, buscando asi proteger la imagen del sector primario frente a un posible enojo presidencial o una opinión pública confundida y evitar una escalada en la confrontación con el ejecutivo. También deja entrever que el mensaje de Milei podría haber sido mal dirigido o mal formulado, lo cual es relevante políticamente, porque marca una diferencia entre intención y ejecución en la comunicación oficial.
Además, al decir que “hay que ver la película completa”, Pino parece mostrarse comprensivo o al menos prudente frente al contexto más amplio, quizá considerando la relación entre el campo y el gobierno libertario, que hasta ahora ha buscado posicionarse en lo retorico como aliado del sector productivo con la expectativa por parte de la SRA de que quiten definitivamente las retenciones al sector en algún momento.